En Find Your OM tenemos un nuevo PROPÓSITO para este nuevo año: compartir con cada uno de ustedes un newsletter todos los meses con una reflexión, una temática mensual, que nos ayuden a profundizar e integrar nuestra práctica de yoga con nuestras vidas fuera del estudio.

Como el 2019 apenas comienza, este primer newsletter estará dedicado a los inicios, a los reinicios, a las intenciones… a las nuevas oportunidades que nos da el comienzo de un nuevo año, ¡a los propósitos!

Los propósitos

Los propósitos son DESEOS escuchados. Se genera un propósito cuando nuestra mente y nuestro corazón aceptan y escuchan un deseo, escuchan ese impulso que sale desde lo más profundo de nuestro ser. Y entonces nos dejamos llevar por esa chispa, esa intuición, esa IDEA, que nos llena de una profunda MOTIVACIÓN por crear y traer al mundo material, a lo tangible, aquello que nos mueve. Esa motivación despierta a la VOLUNTAD y con ella comienza la divertida etapa de la planificación; pero ese deseo inicial debe mantenerse vivo para que la motivación continúe y pueda la voluntad ejecutar poco a poco ese plan maravilloso que hemos creado para nosotros mismos y nuestro desarrollo personal.

Sin deseo no hay motivación, sin motivación no hay voluntad.

Mantener el deseo vivo es lo más importante, sin ese deseo inicial toda nuestra cadena se cae. Y es que basta con un pensamiento que juzgue a ese deseo para que aniquilemos de por vida ese proceso creativo y nos desconectemos de nuestro ser. Esto es muy común. Nos pasa a todos y debe ser nuestra lucha continua. ¡No lo podemos permitir! Así que todos los días, con calma, paciencia y mucho amor, podemos decirle a nuestra mente que se quede tranquila, que hicimos un plan, que tenemos un deseo y que estamos DECIDIDOS a llevarlo a cabo porque somos capaces.

La vida misma es como nuestra práctica de yoga

No todos los días son iguales, no todos los días nos sentimos con la misma energía, alegría, optimismo, flexibilidad, fuerza. No pasa nada. Nos podemos equivocar. No nos los tomemos tan en serio. La postura no tiene que salir perfecta. Pero lo estamos intentando. El plan está hecho y la decisión tomada. Toca confiar, aceptar como amanecimos y dar lo mejor de nosotros en el estado en el que estemos. ¡Ahí es cuando pasa la magia!

Los años nuevos

Los inicios de año están cargados de expectativas, listas largas de nuevos propósitos y muchas intenciones o metas; a veces tantas, que nos agobiamos y llegamos a fin de año en el mismo punto o peor aún, con muchas más angustias y ahora reproches.  ¿Qué tal y si escogemos un propósito, nos llenamos de motivación, alimentamos ese deseo y sin expectativas nos lanzamos al ruedo?

Nuevamente, la vida misma es como nuestra práctica de yoga

Práctica, práctica y más práctica. Es nuestro esfuerzo diario el que nos llevará a mejorar y conocernos profundamente. Somos en el presente lo que hemos venido haciendo en el pasado y seremos en el futuro lo que hagamos hoy.  Todos los días son una nueva oportunidad para seguir intentándolo y cuando menos lo esperemos, habremos alcanzado nuestro propósito habiéndonos dejado SORPRENDER por un camino lleno de momentos y APRENDIZAJES INESPERADOS que nos hacen aún más grandes de lo que pudimos haber visualizado.  

NAMASTE